García Linera indicó que está asegurada la totalidad del financiamiento para los tres tramos de la carretera que unirá a los departamentos de Cochabamba y Beni y que el Embajador de Brasil, Marcel Fortuna Biato fue mal interpretado cuando se informó que el crédito de su país está supeditado a un acuerdo con los dirigentes del Territorio Indígena del Parque Isoboro-Sécure (TIPNIS), Beni, por donde pasará el tramo II de la carretera de 337 kilómetros.
En una conferencia de prensa dijo que hay muchos indígenas dentro y fuera del Parque Nacional que han solicitado que la carretera pase por sus comunidades y otros exigieron variantes para tener acceso a la ruta principal.
Reiteró que el diseño del segundo tramo aún no fue elaborado y aseguró que el Gobierno realizará todas las consultas necesarias y las averiguaciones correspondientes, en un trabajo que podría demandar por lo menos un año y, entre tanto, se avanzará el tramo I y el tramo II.
"El diseño del tramo II que pasa por el Parque aún no se ha definido, si irá por la mano izquierda o la mano derecha o irá por el centro y eso va ser objeto de consultas. Aún tenemos tiempo por el delante para pensar en el tramo II", declaró.
Recordó que la totalidad del crédito fue aprobado por la Asamblea y los desembolsos proceden a partir de pedidos que hace el gobierno cumpliendo sus propios procedimientos, por lo tanto "no hay condicionamientos, así son las reglas, hay una mala interpretación en lo que el embajador ha declarado el día de ayer (miércoles)".
El Vicepresidente indicó que el gobierno, cuando tenga licencia ambiental para el tramo II cumpliendo requisitos propios, pedirá inmediatamente el desembolso y para ese objetivo se hablará con los dirigentes indígenas para definir el trazo, pero además se consultará a las comunidades a fin de de recoger sus criterios para ver cómo se construye la carretera que garantice la integración entre ambos departamentos.
Ratificó que la construcción de la carretera es una necesidad nacional que involucra a indígenas de tierras bajas, de tierras altas, de campesinos, por lo que, dijo que el tramo II requerirá de mucho trabajo para definir por dónde va ir, tomando en cuenta la parte técnica, social y la parte ambiental para ver por qué lado del Parque tiene que atravesar la carretera.
"El crédito es para la totalidad de la carretera aunque siempre hay un margen flexible porque puede ir variando en función de los estudios que se están haciendo, a medida que avanza la carretera ׳llave en mano׳ que siempre es muy cara que una carretera con tiene diseño final", manifestó el segundo mandatario.
El Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDES) otorgó un crédito 330 millones de dólares sobre los cuales el gobierno otorgó una contraparte hasta cubrir 415 millones de dólares que permitirá la construcción de 337 kilómetros. Sin embargo, los indígenas del TIPNIS cuestionaron el tramo II porque atravesaría el corazón de la reserva natural afectando el hábitat de miles de indígenas por lo cual organizan una marcha provista para el 15 de agosto próximo.
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